GAP Cooperativa, un modelo de sostenibilidad y economía circular en el sector porcino

En el marco del informe «Los Retos del Sector Porcino Español», la cooperativa GAP y su planta de tratamiento de purines TRACJUSA destacan como referentes en la gestión sostenible de residuos ganaderos. El documento resalta su contribución a la economía circular y al desarrollo ambientalmente responsable en la comarca de Les Garrigues.

Este informe, presentado por Interporc el pasado mes de julio, recoge los datos más recientes del sector porcino en España, destacando su crecimiento, impacto económico y su firme compromiso con la sostenibilidad en sus dimensiones económica, social y medioambiental. El sector porcino de capa blanca se consolida como uno de los principales motores de la economía nacional, con una producción de 4,85 millones de toneladas y una aportación del 9,5 % al PIB industrial.

Análisis específico de GAP Cooperativa y TRACJUSA (pag 142-43)

El informe «Los Retos del Sector Porcino Español» dedica una sección destacada al análisis del caso de GAP Cooperativa y TRACJUSA, subrayando su papel clave en la sostenibilidad del sector porcino en España. La página 142 del informe señala positivamente cómo GAP Cooperativa ha implementado modelos avanzados de gestión de purines y valorización de residuos que benefician tanto a los ganaderos como al medio ambiente.

La historia de GAP Cooperativa y TRACJUSA

GAP Cooperativa, con más de 140 socios, se ha consolidado como una de las principales entidades de referencia en la gestión de purines en la región. Con más de 17.000 reproductoras y 249.500 plazas de engorde vinculadas a sus asociados, GAP ha logrado integrar un sistema que no solo controla el impacto ambiental de las explotaciones, sino que además optimiza la producción agrícola en más de 5.000 hectáreas de cultivo.

Desde sus inicios a finales de los años 90, GAP ha buscado soluciones sostenibles para el exceso de purines en una región caracterizada por la alta densidad ganadera. En 2001 y 2004, la construcción de las plantas TRACJUSA y VAG (en la actualidad Neoelectra es el propietario mayoritario de esta planta; no obstante, la planta sigue siendo un punto de referencia para el tratamiento de los excedentes de deyecciones ganadareras de los socios/as de GAP) marcó un hito en su estrategia medioambiental, permitiendo el tratamiento de miles de toneladas de purines, que luego son convertidos en fertilizante orgánico de alta calidad.

Impacto en la economía circular

El tratamiento de purines mediante tecnologías innovadoras ha sido clave para reducir el impacto de estos residuos en la zona. TRACJUSA y VAG utilizan procesos de secado y valorización que no solo disminuyen los residuos, sino que contribuyen a la exportación de fertilizantes a otras zonas agrícolas con demanda. Este enfoque ha permitido que GAP Cooperativa sea pionera en la implementación de un sistema de economía circular, donde los purines no son vistos como residuos, sino como un recurso valioso para la agricultura.

Hacia un futuro sostenible

El informe destaca el compromiso de GAP Cooperativa con el desarrollo de tecnologías que aseguran una producción porcina más limpia y eficiente. La integración de sistemas de gasificación de residuos urbanos en sus procesos de secado es un claro ejemplo de su voluntad de buscar constantemente mejorar sus prácticas, alineándose con los objetivos de sostenibilidad de la Unión Europea.

Además, GAP Cooperativa ha implementado medidas para garantizar que sus operaciones sean beneficiosas para el entorno rural. La generación de empleo, la retención de la población en las zonas rurales y la capacitación de nuevos ganaderos son algunos de los logros adicionales que ha conseguido la cooperativa, consolidándose como un actor clave en el desarrollo socioeconómico de la comarca de Les Garrigues

Con estos avances, GAP es un ejemplo claro de cómo las cooperativas pueden contribuir de manera significativa a la economía circular y a la protección del medio ambiente. En definitiva, el informe «Los Retos del Sector Porcino Español» pone en valor la labor de GAP Cooperativa destacando su papel pionero en la sostenibilidad del sector ganadero. A través de la gestión responsable de purines y la apuesta por la economía circular, estas entidades no solo mejoran la producción porcina, sino que también protegen el entorno natural y promueven un modelo de desarrollo económico y social sostenible para la región. GAP ha apostado firmemente por la optimización de la base agraria de la zona de actuación, ajustando las cantidades de nutrientes requeridos en función del balance agronómico. La existencia de las plantas de tratamiento de purines ha permitido la exportación de los excedentes a otras zonas agrarias con necesidades de fertilizantes. 

Interporc destaca el liderazgo del sector porcino en España y su compromiso con la sostenibilidad

A través de este informe, la Interprofesional Agroalimentaria del Porcino de Capa Blanca, que recoge los datos más recientes del sector porcino en España, se destaca su crecimiento, impacto económico y su firme compromiso con la sostenibilidad en sus dimensiones económica, social y medioambiental. El sector, que se caracteriza por su humildad y su fuerte arraigo en las zonas rurales del país, ha conseguido erigirse como líder en la producción europea, con una cifra récord de 4,85 millones de toneladas en 2023.

Impacto económico y liderazgo europeo

El sector porcino representa el 9,5 % del PIB industrial, lo que lo convierte en un pilar fundamental de la economía española. Además, ocupa el 40,7 % de la producción ganadera final y el 15,8 % de la producción final agraria del país. En términos de empleo, el sector genera 415.000 puestos de trabajo directos, indirectos e inducidos, lo que representa el 2,3 % del empleo total en España.

La capacidad exportadora del sector también juega un papel clave en la economía nacional. Solo en 2023, se exportaron 2,75 millones de toneladas de carne fresca y productos elaborados a más de 130 países, destacando mercados estratégicos como China, Francia, Italia, Japón y Filipinas.

Compromiso con la sostenibilidad

Más allá de los números, lo que define realmente a la industria porcina española es su compromiso con un modelo de triple sostenibilidad. Este enfoque busca equilibrar el crecimiento económico con la responsabilidad social y la protección medioambiental. El sector ha apostado por una ganadería moderna y responsable, con el objetivo no solo de liderar en volumen de producción, sino también en calidad y sostenibilidad a lo largo de toda la cadena de valor.

En este sentido, la monografía presentada resalta cómo el sector porcino ha adoptado prácticas innovadoras y sostenibles, posicionándose como un referente a nivel global en cuanto a responsabilidad medioambiental.

La publicación de esta monografía no solo reafirma el liderazgo del sector porcino de capa blanca en España, sino también su compromiso con el desarrollo sostenible y su papel crucial en la economía del país.

Informe «Los retos del sector porcino español»

Grupo Griñó y GAP Cooperativa unen fuerzas para renovar la planta de Tracjusa, impulsando un nuevo proyecto de economía circular

  • Compartirá al 50%, con GAP Cooperativa, el crecimiento y desarrollo de esta instalación.
  • Ambas compañías se alían para contribuir a la descarbonización y transición energética en España.
  • Esta alianza corrobora la apuesta por la economía circular y la sostenibilidad ambiental de ambas entidades.
  • El objetivo común es transformar la planta en un centro de valorización de materia orgánica para la producción de combustibles renovables y biofertilizantes.

El acuerdo firmado entre el Grupo Griñó y la cooperativa GAP (Gestió Agroramadera de Ponent), expresa la firme apuesta de las dos compañías por la transición hacia un modelo económico basado en la optimización de los recursos biológicos renovables. El desarrollo del proyecto promoverá la generación de puestos de trabajo directos e indirectos y contribuirá, de una manera significativa, al desarrollo económico de la zona.

Lleida, 17 de mayo de 2024.- El Grupo Griñó, grupo empresarial que centra su modelo de negocio en la transformación de los residuos en recursos y en promover la transición hacia una sociedad neutra en carbono, y GAP, una cooperativa agraria que reúne a cerca de 160 ganaderos y ganaderas de la comarca de les Garrigues, han firmado un acuerdo estratégico para el desarrollo de la planta de transformación de deyecciones ganaderas Tracjusa.

Griñó aportará su experiencia y conocimiento en el desarrollo, construcción y operación de plantas de biogás y biometano y en tecnologías de tratamiento y purificación de gases. GAP Cooperativa, impulsora del proyecto de Nova Tracjusa, destaca por mejorar y optimizar la gestión de los residuos ganaderos a nivel territorial, así como por realizar una gestión adecuada, efectiva, meticulosa y sostenible de los excedentes de deyecciones ganaderas.

El objetivo común de este proyecto estratégico se desarrolla en diferentes líneas: En primer lugar, optimizar la actual planta de biogás. El proyecto apuesta por incrementar la capacidad de digestión anaeróbica del tratamiento de deyecciones ganaderas y otros residuos orgánicos. El gas producido será depurado mediante un proceso de upgrading para obtener biometano, que será inyectado en la red, contribuyendo así a la descarbonización y a la producción de energías alternativas para sustituir el combustible fósil.

Por otro lado, se implementará un sistema de gasificación térmica, a partir de la valorización de CSR (Combustible Sólido Recuperado, proveniente de residuos) y biomasa de origen local, produciendo un gas de síntesis que se utilizará para producir vapor destinado al secado térmico de deyecciones ganaderas. El uso del CSR como materia prima permitirá reducir el uso de combustibles fósiles y, en consecuencia, se reducirán las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).

Por último, se posibilita la obtención de un biofertilizante de calidad, gracias a la transformación en un granulado comercializable que, en su momento, disminuirá la necesidad de importar fertilizantes inorgánicos de terceros países y los impactos asociados a su producción y transporte. 

Este acuerdo estratégico demuestra el compromiso de Griño y GAP Cooperativa con la generación de riqueza para el territorio de manera responsable y sostenible y su compromiso a la hora de promover la economía circular y la transición hacia un modelo energético más sostenible, que contribuya a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.